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Enrique García Ojeda, piloto cántabro retirado de la competición y Campeón de Europa (2007) y de España (2008) con la marca Peugeot, atendió la llamada de Tramalón en Directo el pasado martes para realizar una bonita tertulia de sus años en competición y del proyecto actual en el que está involucrado desde hace varos años, KRS.

Tras ganar el Desafío Peugeot en el año 2000, Ojeda saltó al equipo oficial de Peugeot con el 106 Maxi, un coche «muy rápido pero poco fiable», tal y como comenta el cántabro. Su rapidez y ayuda de algunas personas fueron claves para mantenerse en Peugeot durante dantos años, sobre todo los primeros: «ganar el Desafío fue vital. Demostramos la velocidad y la marca confió en nosotros muchos años», confesó.

Ojeda en su primer año como oficial en el 106 Maxi. Imagen: todocoleccion

El ex campeón tuvo la gran oportunidad de disputar el Rallye de Avilés de 2002 con el Peugeot 306 Maxi Kit-Car de Senra. Preguntado por dicho aparato, sólo tiene buenas palabras: «Es el aparato que mejores sensaciones me ha transmitido. Si pudiera elegir repetería con ese coche de todos los que he conducido», afirmó.

Tras varios años de aprendizaje con los 206 S1600, el destino y su trabajo, junto al de Jordi Barrabés, les llevó a conquistar el Campeonato de Europa de Rallyes (IRC por aquel entonces) con el Peugeot 207 S2000. «Fue el mejor año y el más arriesgado de nuestra vida, con libradas en cada tramo», confirmó el cántabro.

El gran año del triunfo en el IRC. Imagen: Mondego Sport

Al año siguiente, de nuevo Campeón, en esta ocasión del CERA y de nuevo con Peugeot, frente a un gran Sergio Vallejo con el Porsche. Después, se vio inmerso en bonitos proyectos con Subaru, un Ford Fiesta R2 y con Citroën y Autogomas. Esta última fue la marca con la que disputó su último rallye como participante en el año 2013. Dejó su sello con un tremendo decimotercer puesto en el Rallye RACC.

Ojeda nos comentó que estuvo a un paso de volver a competir en el Rallye de Santander del año pasado, la última edición de la fabulosa prueba cántabra. «Teníamos todo atado y hablado. El coche era un Ford Fiesta R5, pero a pocas horas de cerrar las inscripciones nos echamos atrás«. Quién sabe si habría discutido la victoria a los Pernía (ganador), Ares o López.

Actualmente, sus vistas a corto plazo están puestas en KRS, empresa especialista en suspensiones y puesta a punto. Cada vez más equipos confían en esta estructura para poner a punto sus coches. El último en sumarse ha sido Luis Monzón con el Citroën C3 R5, sumándose a los Javier Polidura, Toni Ariete o Iván Ares, entre muchos otros.

Instalaciones de la estructura cántabra.
Entrevista completa a Enrique G. Ojeda

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