Andreas Mikkelsen aprovechó los días previos al Rallye de Italia-Cerdeña para realizar una jornada de test con el Ford Fiesta WRC del equipo finlandés JanPro Racing, propiedad de Jahne Tuohino. El noruego volvió a subirse a un coche de la categoría reina después de sus pruebas con el Citroën C3 WRC.
Varios fueron los rumores que apuntaban a que el noruego probaría el coche con el objetivo de una posible llegada a Ford en 2022. No obstante, la jornada estuvo dirigida para seguir probando los neumáticos Pirelli en tierra, con el objetivo de conseguir más datos sobre diferentes compuestos.
El piloto probador de la marca de neumáticos italiana descubrió por primera vez las sensaciones en la máquina de M-Sport. Recordemos que, desde su entrada a la máxima categoría en 2013, Mikkelsen trabajó para Volkswagen (Polo WRC), Citroën (C3 WRC) y Hyundai en última instancia, a bordo del i20 Coupé WRC.
Mikkelsen también facilitó datos a JanPro Racing sobre su unidad, aprovechando uno de los parones para cambiar reglajes en el coche con el objetivo de «cortar» con más facilidad en la entrada de las curvas. No obstante, el tiempo se echó encima, y no rodaron los kilómetros deseados.
Uno de los amortiguadores del coche dijo basta durante la tarde, tal y como detalla el noruego en su último blog subido a YouTube. Pese a que la intención pasaba por reparar y seguir rodando, no pudo ser. Mikkelsen explicaba lo siguiente, disgustado: «Finalmente no seguimos, empezó a ser muy tarde y era difícil conducir. Por razones de seguridad hemos decidido parar. Necesitamos hacer más kilometraje. El día no se dio bien, es parte del juego, pero tenemos en mente más pruebas».
2021 continuará intenso para Andreas Mikkelsen, que participará con el Skoda Fabia Rally2 Evo de Toksport WRT en el WRC2 (categoría que lidera por el momento) y en el Campeonato de Europa. Su siguiente parada será el Rallye de Letonia (ERC), Sus planes pasan, a partir de 2022, por volver al WRC como piloto oficial.
Blog completo de la jornada de test: