El mercado con los coches ex oficiales está que arde por todo el mundo. Ayer compartíamos un Peugeot 206 WRC de un equipo francés. Hoy es el turno de otro coche que gusta mucho a los aficionados, el Hyundai Accent WRC Evo 3.5. Sin duda, un coche puntero y barato en relación a otros coches del Campeonato del Mundo.
La unidad que traemos hoy es la número 22 (matrícula X22 HMC, de Inglaterra). Juha Kankkunen fue el primer piloto encargado en ponerla en marcha, en su etapa como piloto oficial en la estructura coreana -2002-. Corrió un total de cinco rallyes, cosechando como mejor resultado un quinto puesto en Nueva Zelanda.
Al año siguiente, Armin Schwarz, piloto alemán también oficial por aquel entonces, corrió tres rallyes. Tampoco cosechó resultados brillantes. Marcas como Subaru, con el Impreza, Citroën, con el Xsara, o Ford, con el Focus, parecían estar un paso por delante en todos los terrenos.
Una vez llegados los meses finales de 2003, llegó a manos privadas, concretamente de Jozef Béreš. Desde el año 2012, fue propiedad del inglés Damian Cole. Este ha disfrutado de varios coches de este estilo, como el Impreza del 1998, el Focus de 2005 o su actual unidad, el Fiesta de 2012, ex Tänak o Evans, entre otros. Ahora está en Noruega, con Andreas Wiik a sus mandos. Sus últimas pruebas –2019– han acabado en golpe y averías.
El coche se ha puesto en venta por una cantidad de 120.000 euros, 80.000 menos que el anterior Peugeot 206 WRC del que también hablamos. El coche se ha repintado con los colores oficiales de la época (con Kankkunen y Repo). Como en los últimos años, luce las especificaciones de asfalto. Viene con repuestos, como ruedas o partes de carrocería.
