Albert Orriols es uno de los pilotos más queridos por la afición catalana desde hace muchos años, además de doble campeón local. Ha disputado, también muchas pruebas del CERA y del CERT, con grandes resultados. Hace unas horas hemos conocido su cambio de montura: ha vendido su Ford Fiesta RS WRC para dar entrada a un nuevo Ford Fiesta Rally2.
El nuevo Fiesta es un coche prácticamente nuevo, con una carrera. Este es el principal motivo del cambio de categoría: «Teníamos experiencia con coches R5 y WRC y nos apetecía cambiar de aires a algo más moderno. El Ford Fiesta R5 MKII es un coche de última generación, y con el que podemos correr todo lo que nos apetezeca«.
En algunos campeonatos, participar con un coche antiguo del Campeonato del Mundo crea impedimentos. A partir de ahora, con el R5, Orriols podrá realizar rallyes nuevos con un coche de última generación: «Podremos realizar salidas al Campeonato de España, correr pruebas del WRC como Cataluña con menos coste…».
Sobre la venta del Ford Fiesta WRC, Albert nos ha admitido lo siguiente: «Los WRC son coches que transmiten unas sensaciones muy especiales y que no se pueden describir. Sin embargo, a veces pecan de falta de fiabilidad por pequeños detalles. El año pasado ganamos todas las carreras que corrimos con él. Sin embargo, por dos averías en Viratges y Osona, no conseguimos el certamen catalán».
El WRC se ha ido a Francia, a manos del equipo local Rally Service Racing (Neulise, Francia). Este coche debutó en el Campeonato del Mundo (WRC2) con Nasser Al-Attiyah, cuando compartía especificaciones RRC, algo inferiores. Antes de Orriols, su último propietario fue Daniel Alonso, cuyo propósito era utilizarlo en la tierra española.
Dicho equipo sumará el primer WRC a su magnífica flota, compuesta por varios Renault Clio S1600, un Renault Megane Maxi, algún S2000 y numerosos vehículos R5, entre los que destaca el Skoda Fabia. Esta misma escuadra ha sido la encargada de vender la nueva unidad a nuestro protagonista.
Planes con la nueva montura: Su idea principal era disputar el rallye de casa, el Rallye RACC, que este año puntuaba para el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto. Tras conocer su anulación, el equipo se encuentra reestructurando su calendario. Su primera prueba podría ser el Rallye de Xixona o el Ral·li de la Llana, ambas en septiembre. Se está valorando.
Además, su idea es disputar una prueba también en País Vasco. Ya corrió en dicha comunidad hace varios años, en el Rallysprint de San Miguel, o el Rallye de Oyón (puntuable para el Vasco). Si nada se tuerce, visitará el Rallye de Gernika, en la segunda semana de octubre. Otro de sus planteamientos era el Rallye Lea-Artibai, cuya disputa se muestra complicada.
Dentro el Campeonato de España, una carrera más que posible para correr, por cercanía, es el Rallye de la Nucía Mediterráneo, durante el primer fin de semana de noviembre. Esto nos comenta el catalán: «Es un rallye que me gusta, y en caso de realizarse sería una gran opción para sumar experiencia de cara a 2021″.
