Tramalón ha tenido la oportunidad de hablar con Albert Orriols, piloto catalán que ha logrado numerosos triunfos a lo largo de su trayectoria deportiva. Orriols ha disfrutado de numerosos vehículos, como los GT, Grupo N, R5 o incluso WRC. A día de hoy se encuentra inmerso en el Regional Catalán con un precioso e imponente Ford Fiesta WRC.
¿Por qué te decantaste desde el primer momento como piloto?
Desde muy pequeño iba a ver los todos rallyes. En muchas ocasiones solo, hasta altas horas de la madrugada. Soy un apasionado del mundo del motor y soñaba con pilotar un coche de rallyes. Es por ello por lo que decidí comenzar como piloto y no como copiloto a la derecha.
¿Cuál ha sido el mejor momento de tu carrera deportiva? ¿Y el peor?
El mejor momento se produjo en el año 2006, cuando gané el primer Campeonato de Cataluña de Grupo N con el Mitsubishi. Otro recuerdo muy bonito fue mi primera victoria en el Rallye de Osona, la cual me hizo una ilusión tremenda. El peor momento fue el fuerte accidente con el Skoda Fabia R5 -justamente también en Osona- a causa de una desllantada. Estuvimos muy cerca de hacernos mucho daño.
¿Qué mejorarías de los rallyes del Regional Catalán?
Intentaría hacer rallyes más compactos para atraer la participación de los equipos. En algunas ocasiones, para una prueba de cincuenta kilómetros, se necesita estar todo el fin de semana, cuando se podría hacer en una mañana. Esta forma avarataría los costes de los equipos y creo que mejoraría la participación. Por otro lado, una parte muy importante son las copas de promoción. No podemos olvidarnos de los jóvenes pilotos que vienen.
¿Crees que se podrían hacer más monomarcas en Cataluñña como antaño?
Estas copas son la base para todo piloto. Cualquier ayuda que se ofrezca, ya sea en premios o en material, es muy importante. Poder salir a correr muchos fines de semana, tener esa formación y ver dónde estás con mecánicas calcadas es básico para aprender. En mis inicios como piloto, en el Volant RACC, estábamos corriendo alrededor de 35 pilotos. Eso ahora mismo es impensable, pero hay que buscar fórmulas de nuevo.
¿En que prueba del Mundial te gustaría correr y con que vehículo?
Sería una carrera muy diferente de lo que podemos encontrar por aquí. Por ejemplo, un Rallye de Finlandia o de Suecia, cuyos tramos son realmente rápidos y atípicos. Por supuesto, de darse la oportunidad, sería con un World Rally Car de nueva generación, el mejor aparato que podemos encontrar hoy en día.
¿Cuál ha sido tu coche preferido de los que has conducido?
El Peugeot 206 WRC. Es un coche que venía de un equipo oficial (ex Grönholm y ex Panizzi). Nosotros lo adquirimos tras correr las anteriores temporadas con un Subaru Impreza o el Mitsubishi de Grupo N, por lo que supuso un salto de prestaciones muy bestia. Es una montura muy competitiva y agradable para el piloto. Disfruté mucho con aquel coche.
¿Tienes alguna anécdota chula para contarnos?
Una realmente curiosa fue en el Rallye RACC Cataluña del WRC en el año 2007, con el Subaru Impreza. A falta de un tramo por finalizar, casi con los deberos hechos, se nos rompió un latiguillo de freno del Subaru. Estuvimos muy cerca de abandonar porque no había manera de bloquear para poder ir con freno en las tres ruedas restantes. Lo intentamos con una piedra pero cuando cogía presión la escupía.
De repente, un aficionado presente en el lugar nos ofreció la solución de ponerle la colilla de un cigarro con la nicotina para que obturara e hiciera una pasta en el latiguillo. Gracias a eso pudimos acabar la carrera. En ese mismo Rallye, rompimos la suspensión dos años seguidos en la misma curva, muy curioso también.
Imagen: Abel DIaz
¿Te has planteado correr el Campeonato de España?
Durante los años 2006 y 2007, con el Subaru Impreza STi, realizamos diversas pruebas, tanto del Campeonato de Asfalto como el de Tierra, pero sin animarnos a correr ningún certamen completo. De momento no entra en nuestros planes para el futuro más cercano.
Fuera de Cataluña, ¿cuál es la carrera que más te ha gustado?
La prueba que más nos ha gustado fuera de nuestra comunidad autonóma fue el Rallye de Villajoyosa, que en su día fue puntuable para el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto. Dentro del CERA tenemos dos pruebas marcadas, por el ambiente que generan y sus tramos: el Rallye Princesa de Asturias o cualquiera de las pruebas por Canarias.
¿Qué destacarías de tus copilotos?
Una parte vital del mundo de los rallyes es la confianza que me han dado durante todos estos años para poder ir rápido y bien compenetrados en cualquier tramo y superficie. Además, una cosa vital y básica para mí es que hemos logrado hacer equipo. Por encima de cualquier otro asunto, me quedo con eso.
¿Cuál es el título que mejor recuerdo te trae?
La primera vez que logramos vencer el Campeonato de Cataluña de Rallyes absoluto fue muy especial. Ganar también categorías en Montaña es algo muy chulo por ser diferente a lo que estamos acostumbrados. Nuestro papel en el RC2 del Rallye de Cataluña con el Fabia R5, rodeados de equipos profesionales, también nos ha marcado para bien.
Imagen: Christian Oria