Uno de los pilotos asturianos que marcó una época dorada en el Campeonato de España durante sus años en activo, con dos títulos, y que guarda el cariño de todos los aficionados. Seguro que se os ha venido el nombre de Alberto Hevia a la cabeza. Tramalón ha charlado con él para conocer sus recuerdos de todos los coches y por qué no, preguntar por una posible vuelta esporádica al baquet.
Renault Clio S1600, de 2003 a 2005
Tras su paso por la Copa Clio, con el título de Campeón de Asturias incluido en 2002, la marca francesa fichó a Hevia como piloto oficial con el Renault Clio S1600. La unión duró tres años (2003-2005) y los recuerdos del asturiano son muy emocionantes. Así nos lo comenta:
«El Clio S1600 era un coche de carreras de verdad. No tenía mucha potencia, pero la frenada y el paso por curva impresionaban. El mejor recuerdo que guardo fue en mi época como piloto oficial. Sólo te preocupabas de correr y hacerlo lo mejor posible, y eso suponía una gran tranquilidad. Antonio Galisteo se portó increíble conmigo, le agradezco muchísimo su ayuda».
Hevia no consiguió ninguna victoria con el coche en el CERA de 2003, pero la gran gesta llegó un año después. El de Pola de Siero, acompañado de Alberto Iglesias «Pin», consiguió el título de 2004. Sus victorias en Villa Joiosa, Ourense, Avilés y Príncipe de Asturias fueron claves para batir a Vinyes, Ojeda y Vallejo. «Vaya luchas tuvimos, la batalla con Sordo y Martí en 2005 fue otra de las grandes de aquellos años«, recuerda.
2005, última temporada de Hevia con Renault, perdurará en el recuerdo de todos los aficionados. El campeonato se decidió por un punto entre un jovencísimo Dani Sordo, que llegaba para comerse el mundo con el Citroën C2 S1600. 1,3 segundos en el Rallye Príncipe de Asturias, último del año, decidieron las cosas a favor del cántabro.
Peugeot 206 S1600 en 2006
En 2006, Alberto Hevia se subía por primera vez al Peugeot 206 S1600 con el cometido de realizar el mejor papel posible. En dicha campaña, Dani Solà se hizo con el título nacional a bordo del Citroën C2 S1600. Nuestro protagonista, por su parte, clasificó en cuarto lugar. Así recuerda dicha campaña para Tramalón:
«El 206 era también una gran máquina, pero diferente al Renault, más radical. Era más difícil de conducir. La primera vez que me bajé me acuerdo que felicité a Ojeda y Vinyes: «Tenéis unos huevos muy grandes de llevar esto tan rápido», les dije. Era bastante más nervioso que el Clio».
Además, añade sobre aquellos coches: «Con los S1600 se podía ir muy rápido, pero eran muy importantes los reglajes. La época más bonita fue la del Clio. Correr como 100% oficial es el sueño de cualquier competidor que ama este deporte y se dedica a ello».
Sobre los rivales… «Dani Sordo, Miguel Fuster, Enrique García Ojeda… Fue una época impresionante dentro del Campeonato de España de Rallyes de Asfalto», resalta.
¿Qué coche iba mejor?
«Eran dos auténticas máquinas, pero con diferencias. Con buen asfalto el Peugeot iba mejor, pero en zonas de botes y peor firme el Renault se defendía bastante. Ojeda y Vinyes lo hicieron correr mucho durante esos años. Si me tengo que quedar con algún S1600 (de los que he llevado) sería el Clio sin ninguna duda», destaca.
Volkswagen Polo S2000 en 2007
En 2007 llegó la época del Volkswagen Polo S2000, una montura totalmente inédita en el Campeonato de España. Hevia sumó sus primeros kilómetros con un tracción total en el CERA, sin contar sus apariciones esporádicas con Mitsubishi en el Regional Asturiano. Así lo define:
«La pega que tenía ese coche que no era de fábrica. Era bastante pesado y nos dio muchos problemas«, recuerda. El coche provenía de un equipo belga, René Georges Rallysport, y el equipo asturiano lo utilizó a modo de alquiler. Según palabras de Hevia, «no acabaron muy contentos« con el rendimiento.
A pesar de ello, Hevia lo hizo correr, y de lo lindo. Llegaron a Costa Brava con opciones de vencer el título ante Miguel Fuster y el Punto S2000, pero no salieron bien las cosas: «El día que nos jugamos el Campeonato en Cataluña, la dirección del Polo iba fatal. Se estropeó el electro ventilador, rompimos dos colectores, una rótula… Aquello fue para olvidar. Nos jugábamos todo y el coche no vino en condiciones«, admite.
Mitsubishi Lancer Evo IX (2008)
El equipo alquiló, en 2008, un Mitsubishi Lancer Evo IX a RMC. Hevia y Pin ganaron la Mitsubishi Lancer Evo Cup de este año por delante de Carlos Márquez y Jordi Martí. Incluso cosecharon algún podio absoluto, como en el Rallye de Ferrol. 2008 fue el año del duelo entre Ojeda (Peugeot) y Vallejo (Porsche) con victoria final para el cántabro.
Así rememora «Berti» su periplo con la máquina japonesa: «Cuando alquilamos el Mitsubishi a Roberto no nos dio ningún problema. Era un coche muy divertido, con mucho par y fácil de conducir. No corría mucho con la brida de 32, y es un coche del que guardamos grandes recuerdos. No frenaba y se sujetaba tanto con los anteriores S1600 y S2000, pero iba realmente fino«.
Skoda Fabia S2000 (2009-2012)
Hevia y Pin lograron su segundo título de Campeones de España de Rallyes de Asfalto con este coche. De nuevo, una bonita etapa, con rivalidad intensa en nuestro campeonato. «Teníamos un buen material, pero nos faltó presupuesto para poder realizar algún test de más y disponer de más recambios. Cuando corres con un coche tuyo, con 300.000 euros debajo del culo… Cambia mucho la cosa. Noté que, cuando iba cumpliendo años, iba más lento», desvela Hevia.
La unión provocó varias victorias y momentos bonitos para ellos: «Hicimos carreras muy aceptables, como aquel Príncipe de Asturias del Campeonato de Europa. El Skoda y el Clio fueron los dos que más me gustaron conducir. Los reglajes del coche eran una maravilla, ya que se notaba cada detalle y a mi me encantaba probar diferentes parámetros».
Hevia y Pin cosecharon un total de diez victorias nacionales a los mandos de la unidad checa, puntera también a su vez en el Campeonato de Europa de Rallyes. Su útlima prueba con él fue el Rallye Montaña Central de 2013, puntuable para el Campeonato Asturiano de la especialidad.
Hevia quiso destacar lo siguiente: «Tuvimos apoyo de la marca, pero no como oficiales. La última época me veía bastante menos ágil que años atrás, pero fue muy bonita. Nació mi primera hija y me cambió el chip completamente, fue muy distinto. No iba tan agusto a las carreras».
Suzuki Swift S1600
Tras tres temporadas parado, Suzuki Ibérica dio la oportunidad a Hevia de sustituir a Joan Vinyes durante tres carreras en el CERA 2015. Fue a bordo del Swift S1600, y el asturiano demostró que tenía ritmo más que de sobra para plantar mucha batalla. Llegó a ser quinto en el Rallye de Ourense, y sólo tiene palabras de agradecimiento:
«Agradezco mucho a Manel y Frande la oportunidad que me dieron. Manel y Sandra fueron mis mentores, sin ellos no habría ganado ningún campeonato. Me llamaron para sustituir a Joan, rememorando la época de los S1600. El Suzuki iba muy bien, me adapté e hicimos buenos tiempos. Un coche magnífico«.
¿Has tenido oportunidad de probar algún R5?
La respuesta es afirmativa: «Tuve la oportunidad de probar el Ford Fiesta R5 de Óscar Palacio. Me recordó al S2000, pero con bastante más par abajo. Son coches para carreras, que van genial, pero siguen siendo caros para un equipo privado. Ahora hay pocas marcas oficiales y está todo complicado, más aun viendo la situación de hoy en día».
Y la pregunta del millón. ¿Podríamos volver a ver a «Berti» Hevia subido a un coche de carreras?
Es la pregunta que se hacen muchos aficionados que nunca olvidarán la gesta del piloto asturiano en nuestro campeonato. Preguntado por ello, el asturiano tiene bastantes claras sus prioridades cerca de cumplir 47 años:
«Sinceramente, me veo mayor para vivir el ritmo que me gusta tener en las carreras. Un día, una carrera suelta si me gustaría, tipo subida o algo del estilo. Si me llamaran ahora mismo para sustituir a Vinyes de nuevo -como ejemplo-, creo que no me vería capacitado. Estoy centrado en el negocio y en la familia».
Desde aquí solo nos queda agradecer el tiempo y amabilidad que «Berti» ha despositado a este medio de comunicación. Grande dentro y fuera de las carreras. ¡A disfrutar la entrevista!
