Kelly es un apellido relacionado con el mundo de la competición desde hace muchos años. Frank Kelly es una de sus piezas fundamentales, además del piloto. Hemos hablado con él sobre su precioso Ford Escort MKII (Baby Blue), sus planes de futuro y la experiencia tras sus apariciones en tierras españolas (Solo Escort y Festival Trasmiera).
Lo primero de todo, ¿qué tal has llevado el confinamiento?
Cuando llegamos a casa desde España (tras correr el Rallye Solo-Escort en Asturias), entramos en nuestro propio aislamiento una vez asentados en nuestro hogar. Pasada una semana, Irlanda se cerró, por lo que tuvimos un largo período de confinamiento. Felizmente pasé esta situación en mi garaje trabajando en el Baby Blue, el precioso Ford Escort MKII.
Durante el parón hemos trabajado en varias pequeñas mejoras para el coche, como la geometría y el equilibrio de pesos. La caja de cambios también ha sido revisada, al igual que los ejes. También nos hemos centrado en los nuevos monos de competición.
Tu Ford Escort MKII es una auténtica joya para ti. Cuéntanos su historia.
Sí, así es. Un amigo lo hizo construir en el año 2005. Yo lo ayudé con la especificación y la configuración. Cuando decidió abandonar los rallyes nos dio la oportunidad de hacernos con él, y hasta hoy.
Tenemos el actual Ford Escort MKII desde el año 2009. Durante todos estos años ha pasado por muchas modificaciones importantes. Como por ejemplo, cuatro tipos diferentes de motor o tres tipos de transmisión. Siempre tenemos el objetivo de trabajar para seguir mejorando nuestros objetivos.
Se ha visto muy mejorado durante todos estos años…
El Escort es un coche muy fácil de manejar y trabajar. Casi cualquier motor encaja. Mi Millington actual es lo último y me transmite mucha alegría a la hora de conducirlo. Cuenta con 340 caballos de potencia. En la actualidad, tengo la caja de cambios secuencial Samsonas, que también es una pasada. Recientemente he actualizado los frenos, montando unos Alcon R5. Siempre pienso «eso es todo, el auto está perfecto y no haré más», pero luego tengo una gran idea y comienza la historia de nuevo (risas).
Has estado en numerosos eventos durante pasadas temporadas. ¿Cuál es tu favorito y por qué?
He tenido la suerte de hacer muchos grandes eventos con el Ford Escort MKII por toda Europa. Destacaría el Rally Legend de San Marino por su atmósfera y locura. Por su parte, el Rallye Festival Trasmiera también me encantó. Nos soprendió el entusiasmo del público presente. No pensé que sabrían quiénes éramos!
¿Y el Rallye Solo-Escort? ¿Acabaste soprendido?
Sí, de nuevo una gran sorpresa por lo bien que fuimos recibidos. Siempre es una preocupación el tener o no un impacto en diferentes países, pero ahora España se está convirtiendo en uno de mis lugares favoritos para correr. La carrera fue difícil por el clima, pero muy agradable por su ambiente. Todo el mundo fue muy amable con nosotros y nos ayudaron cuando necesitábamos algo. Además, los pilotos locales son muy rápidos.
¿Tienes alguna carrera pensada para 2020?
En Irlanda están tratando de realizar un rallye de dos días en Wexford. Está calendado para el mes septiembre, pero será difícil especialmente si COVID-19 regresa nuevamente. Toca esperar. En cuanto a España, estará muy difícil que nos dejen viajar y hacer pruebas fuera de nuestro país.
¿Has conducido algún coche de nueva generación como los R5 o WRC?
He pilotado algún vehículo de la categoría WRC, pero no con rabia, sino tranquilo. Son fantásticos, pero me encanta mi Ford Escort MKII y ahí es donde estoy contento. Tengo suerte de tener este aparato y creo que los propietarios de los WRC están celosos (risas).
¿Qué opinas de la introducción de las energías eléctricas en los rallyes?
Me hace sentir enfermo. Los rallyes siempre tienen que estar ligados con el ruido y el olor de los motores. Así es y siempre debería serlo. No correré más si llegan las energías eléctricas.
¡Gracias por tu tiempo Frank Kelly!