Andreas Mikkelsen y Ola Fløene han completado un Rallye de Monte-Carlo con buena nota El noruego volvía a competir en la prueba inaugural del WRC tras sus aventuras en años pasados con Volkswagen y Hyundai. En esta ocasión, lo hacía inmerso en la categoría WRC2, a bordo del Skoda Fabia Rally2 Evo de Toksport WRT.
Desde el primer momento, Mikkelsen y Fløene dejaron claro que llegaban con mucho ritmo, a pesar de las pocas carreras oficiales disputadas el año pasado. Conocían el coche (tras las tres carreras del ERC en 2020) y, por supuesto, los neumáticos Pirelli, marca con la que trabajó en trabajos de desarollo y test antes de su entrada al WRC.
Como muestra de su rendimiento, cabe destacar que los norguegos sólo se han bajado del “top ten” en tres de los quince tramos disputados. En dos de ellos (concretamente el 6 y 9), finalizaron sextos, delante de pilotos con coches de la máxima categoría como Katsuta, Greensmith, Loubet o incluso Ogier y Neuville (por supuesto de manera puntual en estos casos).
La posición final es prácticamente inmejorable, un séptimo lugar de la clasificación general. La hazaña estuvo a punto de desperdiciarse tras un error en la última especial. Los noruegos llegaron colados a una curva cerrada, chocando contra un pequeño bloque de nieve situado en la cuneta. Quedó en un simple susto.
El otro integrante del equipo TokSport, Marquito Bulacia, ha terminado cuarto por delante del americano Sean Johnston y el italiano Enrico Brazzoli. Adrien Fourmaux, en otra gran demostración de talento, y Eric Camili, han completado el podio entre los participantes del WRC2.
