A pesar de que parecía todo hecho, una última piedra se topó en el camino. Dos de los piltotos oficiales de Hyundai Motorsport en el Campeonato del Mundo de Rallyes, Dani Sordo y Thierry Neuville, fueron noticia durante el confinamiento gracias a una interesante operación.
Tal y como confirmaron varios medios, incluidos nosotros, ambos pilotos se hicieron con sendas unidades del Hyundai i20 WRC de 2014. Concretamente, los coches con que la marca consiguió su primer doblete en el WRC, en el Rallye de Alemania de ese mismo año.
Sin duda, dos piezas únicas, en el año de regreso de la marca coreana a la máxima disciplina de los rallyes a nivel mundial. Según informaron fuentes del motorsport, el precio acordado con ellos por esos coches (por unidad) rondó los 60.000 euros. Una cantidad prácticamente “regalada” tratándose de un WRC ex oficial (los de segunda generación rondan los 200.000 euros como mínimo).
Pues bien, finalmente Sordo y Neuville se quedaron con las manos vacías. En un directo de Instagram con José Antonio Ponseti durante la semana pasada, el piloto cántabro afirmó que, a última hora, esta operación no se pudo llevar a cabo. Una verdadera lástima para ellos.
Todo empezó a través de una cena en la que estuvieron presentes los pilotos de la marca con los máximos dirigentes. Andrea Adamo ofreció sendos coches a sus pilotos (llevaban parados desde el Rallye de Alemania de 2014). El belga y el español aceptaron traer los i20 por la cantidad que habían acordado.
Los mecánicos revisaron los coches y todo parecía ir bien. Incluso Neuville se llevó su joya para Bélgica, acudiendo a la sede de Hyundai Motorsport en Alzenau, Alemania. Hasta que, una llamada de los dirigentes coreanos paralizó todo -parece ser que no estaban acordes con el precio-. Neuville se vio obligado a devolver el coche y Dani Sordo ni lo llegó a recoger.
“No he querido volver a preguntar más”, afirmó Dani Sordo entre risas. Una gran anécdota, sin lugar a dudas, la que nos contó el cántabro en directo. Y una verdadera lástima…
