De una forma u otra, la afición seguirá viendo el apellido Zabaleta durante muchos años más en nuestras subidas. Tramalón ha tenido gusto de hablar con Aitor Zabaleta Junior, hijo del ex Campeón de España y de Montaña también llamado Aitor.
El piloto de Bergara, con 22 años de edad, debutó como piloto en la pasada Subida a Urraki 2020 a bordo de un BMW 330 E46. Las circunstancias (accidente mortal de otro participante) le impidieron rodar todo lo deseado, pero volvió al ruedo en Jaizkibel 2021, donde acabó con muy buenas sensaciones.
Es una respuesta que sabemos todos pero… ¿De dónde nace tu pasión por este deporte?
Efectivamente viene por mi padre, ya que llevamos toda la vida entre coches y gasolina… Empecé a participar en Goitiberas aquí en País Vasco. También compramos un coche para andar en circuito… Una cosa lleva a la otra, y al final ese mismo se ha convertido en nuestro coche de carreras.
Has acudido a numerosas asistencias con la Lola BMW de tu padre…
Sí, más o menos al poco de nacer… Pero mis primeros recuerdos se trasladan al año 2009, cuando mi padre regresó a la competición. Desde entonces le acompaño a todas las subidas que puedo. Hay que echar una mano y se viven las carreras de forma muy bonita, tanto con amigos como con familia.
En 2019 das el salto al baquet derecho para copilotar en alguna carrrera… ¿Qué te parece la experiencia?
Eso es, me invitó un amigo para salir con él al Rallysprint de Azpeitia en 2019, y no me lo pensé ni un segundo. Quería saber lo que suponía correr una prueba y fue una sensación increíble. Me gustó mucho, lo disfrutamos a tope y ya hemos repetido unas cuantas veces.
¿Cómo te planteas preparar el BMW E46 para Montaña? Cuentanos un poco el proceso…
En 2019 compramos un BMW E46 con motor roto. Lo arreglamos entre mi padre y yo y comenzamos a ir a circuito. Meses más tarde, decidimos ponerle barras y prepararlo para subidas. Mi padre me recomendó ese mismo modelo por delante del E36, y la verdad que va muy bien.
¿Qué especificaciones tiene?
Se trata de un 330 E46 prácticamente de serie, tanto de motor (sobre 230 caballos), caja de cambios y toda la mecánica en general. Reparamos los amortiguadores y nos pusimos a correr. La verdad que me transmite muy buenas sensaciones, y sobre todo es muy divertido…
Ya te hemos visto en dos pruebas de Montaña: Urraki 2020 y la pasada Subida a Jaizkibel… La primera de ellas acabó mal, ¿pero qué tal se dio en Jaizkibel el otro día?
Urraki por desgracia no fue bien. En Jaizkibel fue increíble, lo recuerdo y todavía se me pone la piel de gallina. Estuve esperando el momento durante varios meses. La noche anterior estuve algo nervioso, pero en el momento que te pones el casco se pasa todo de golpe. Corrimos con cabeza, de menos a más, y muy a gusto. Intentamos ir fino, ya que el padre no me deja hacer “el gamba” (risas).
¿Se pone tu padre nervioso cuando sales a correr? ¿Te suele dar algún consejo?
Siempre me da consejos muy valiosos. Me dice siempre que no tenga ningún tipo de presión y que no hay nada que demostrar. No es el momento de ponerme metas, sino de ir progresando y disfrutar de este bonito deporte.
¿Qué es lo que más te gusta de la Montaña?
No tengo una cosa clara concretamente, pero la libertad de poder realizar una subida de forma libre, con carretera cerrada, es la mejor sensación que te puede ofrecer. Además, a la hora de entrenar, también me llama mucho la atención el seguimiento de las trazadas, un aspecto que aprendí con mi padre.
¿Qué planes tienes en lo que resta de año? ¿Te gustaría hacer alguna subida fuera de Euskadi?
Acabo de empezar y si estuviera en mi mano haría todas las posibles. Tenemos intención de hacer el Campeonato Vasco de Montaña al completo, con las siguientes pruebas en Bakio y Aia. Si tenemos tiempo, me gustaría participar en alguna de Navarra, como la Subida a Urbasa.
¿Tienes algún objetivo marcado en Montaña a largo plazo? Por ejemplo, llevar algún día la Lola…
Por ahora no tengo nada planteado , pero muchísima gente me lo ha dicho durante los últimos meses. Es una cosa que tengo pendiente pero le tengo mucho respeto, es complicado de llevar. Cualquier mínimo golpe o rotura supone un problema por la falta de recambios. Ahora mismo no, pero dentro de 5-10 años ya me gustaría dar una vuelta.
Por último, ¿qué tal se encuentra Aitor Zabaleta padre? ¿Le veremos este año?
No lo sabemos todavía. Tuvo un accidente laboral en Semana Santa que le afectó dos vértebras y algún problema más. Estuvo un par de meses mal, pero poco a poco va recuperando y nota mucha mejora. Seguro que está con ganas, pero veremos si puede volver en 2021. Podría darse en la parte final de la temporada, y si no será en 2022. Volverá seguro.