Este fin de semana, con la 53 edición del Rallye de Ourense, también daban comienzo otros campeonatos. El primero de ellos, la copa monomarca más famosa de nuestro país, la Suzuki Swift, en su segundo año con la nueva generación del modelo nipón. Un total de 19 equipos se dieron cita dentro de la misma.
Los flamantes vencedores fueron Diego Félix y Raquel Rodríguez. No son novatos en el certamen, ya que Félix lo disputó en el año 2017. Eso sí, con el modelo de segunda generación. La victoria no pudo estar más disputada, al igual que en la general scratch. Miguel García, subcampeón en 2019, junto a Pablo Sánchez, se quedaron a tan sólo 3.6 segundos del triunfo final.
El tercer clasificado, también a escasos segundos, es un viejo conocido dentro de la Suzuki Swift. Pablo Pazó fue tercero con su nuevo copiloto, Alberto Muiñoz. El gallego ha disputado esta copa en seis ocasiones. Esta será la séptima. Ostenta el triunfo de la Copa en el año 2012, además de otros dos subcampeonatos y terceros puestos. Siempre un rival a tener en cuenta.
Cuarto y quinto fueron dos equipos Junior (primeros y segundos en su categoría). Además, dos equipos llegados desde Cantabria, y con el apoyo de su Federación, la FCTA. Aarón Zorilla-Jairo Gómez y Luis Canales-Yadira de Diego mantuvieron un ritmo muy bueno durante todo el rallye y llevaron un gran resultado para la “Tierruca”.
Equipos del regional
Correr una prueba del Campeonato de España de Asfalto, más aún en la situación vivida, es realmente complicado. Aún así, un total de 14 competidores tomaron la salida en el apartado regional. Los ganadores fueron Javier López y Adriana Gómez con el fantástico Ford Escort MKI. Un coche y equipo habituales en el Campeonato de España de Históricos y otras pruebas de clásicos como el Solo-Escort o el Trasmiera.
Completaron esta clasificación “histórica” el Renault 5 GT Turbo de Jaime Sampil-Alejandro González y Rubén González-Alberto Pérez, con un Peugeot 205 GTi. Un auténtico éxito finalizar una prueba tan complicada, tanto por la complejidad de sus especiales como por las altas temperaturas del fin de semana.
Uno de los coches más esperados dentro de este apartado era el Mitsubishi Lancer Evo VI de Jorge Coca y Diego Vázquez. Hasta su retirada, en el TC-5, eran terceros a seis segundos del liderato. Un coche con palmarés, ya que fue, junto con Germán Castrillón, Campeón del Certamen Gallego de Rallye en el año 2000. La decoración que lucía era similar a la de aquel año. Un bonito “remember”.