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Después de cuatro meses sin subirse a un coche de carreras, Efrén Llarena y Sara Fernández volvían a su oficina preferida. El sábado probaron por primera vez con el Citroën C3 R5 en asfalto. Un total de 130 kilómetros para comprobar sus reacciones y sumar confianza. Todo ello con el objetivo de llegar a Roma en la mejor forma posible.

Unos test satisfactorios que han permitido sacar conclusiones: “Cabe destacar el chasis de este coche, no se mueve, es como una auténtica barqueta. Lo que más me ha soprendido es el par motor, como ya comprobé en tierra. Una vez testado en asfalto, he podido comprobar que un gran punto fuerte es el paso por curva. Los apoyos son brutales”, afirma el piloto de Espinosa de los Monteros.

Llarena y Fernández posando con el C3.

A pesar de ser un tramo de test, el equipo español disponía de referencias de pilotos rápidos con idéntica montura en la misma especial cronometrada. No son otras que las de Pepe López y Pedro Fontes. En ese aspecto, el piloto burgalés se ha mostrado “satisfecho” con los cronos realizados.

El Rallye de Roma tendrá lugar el 24 y 25 de julio (además del Monday Test la misma semana). Contará con una lista de participantes espectacular, con mucho mejor nivel de lo que esperado. Además de los habituales del ERC, se suman Adrien Fourmaux (oficial M-Sport), Oliver Solberg (Polo R5) o los Hyundai oficiales de Dani Sordo y Pierre-Louis Loubet.

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